Las diferencias entre TIN y TAE
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¿Qué es el TIN?
El TIN o Tipo de Interés Nominal es el porcentaje fijo de intereses que se acuerda pagar a la entidad financiera por el préstamo. Es una tasa que no tiene en cuenta los gastos y comisiones asociados a la operación que puedan devengarse a lo largo de la vida del préstamo.
Dicho con otras palabras, el TIN es una tasa pactada previamente con la entidad y el porcentaje que se lleva el banco por prestar el dinero. Para cualquier préstamo existe un TIN, da igual si se solicita una hipoteca fija, variable o mixta.
¿Cómo se calcula el TIN?
El TIN es un porcentaje ya acordado que en hipotecas a tipo fijo permanece invariable durante todo el tiempo, por ejemplo: TIN 2,15%. En las hipotecas variables el TIN resulta de la suma de dos elementos. Por un lado, el diferencial de la hipoteca que es un porcentaje fijo, por ejemplo: 0,99%. Por otro lado, el índice de referencia siendo el Euríbor el más habitual de estos. Sumando ambas partes, podríamos concluir que en este ejemplo la hipoteca variable tendría un TIN de 0,99% + Euríbor.
¿Qué es la TAE?
La TAE o Tasa Anual Equivalente es un indicador del coste que productos como préstamos personales o hipotecarios pueden tener para el cliente. En la TAE se incluye el TIN o Tipo de Interés Nominal junto a la comisión de apertura o amortización. Esta tasa contempla también ciertos gastos asociados a la operación. Algunos de estos son los gastos de registro, gastos de tasación o gastos de notaría.
La TAE se utiliza como referencia para comparar entre varias hipotecas. Más allá del montante prestado, este indicador permite saber cuál de las opciones posibles implica un menor coste para el cliente en términos porcentuales. En definitiva, es un criterio muy válido que sirve para tener una aproximación de los costes reales que supone la operación.
¿Qué significa 5% TAE?
La TAE es el porcentaje real que se deberá abonar por el préstamo. En un préstamo hipotecario de 200.000 euros con una TAE del 5% es posible conocer el coste total para el cliente. En este caso, el cliente tiene que abonar 10.000 euros (200.000 x 0,05 = 10.000).
Las principales diferencias entre el TIN y la TAE
El TIN no permite al cliente saber cuánto dinero le va a suponer el préstamo. Puede ser un indicador a tener en cuenta, pero si realmente se quiere ver el efecto que tienen la comisión por amortización, los gastos de tasación o notaría u otros, no es muy útil.
En cambio, la TAE al tener en cuenta los gastos y comisiones asociados a la hipoteca, sirve para comparar entre dos hipotecas y ver el coste de la operación de una forma más clara y con una perspectiva más amplia. Aquellos que quieran conocer el coste real de su préstamo hipotecario deberán fijarse en la TAE.
Es importante saber que las diferencias entre el TIN y la TAE suelen ser mayores en préstamos personales que en hipotecarios.
¿Qué pagas el TIN o la TAE?
Para la mayoría de los usuarios, la tasa que proporciona más información de valor es la TAE ya que sirve para calcular el coste real que supone el préstamo. El TIN es el porcentaje que el banco obtiene por el servicio prestado, sin embargo, no es lo único que debe pagar el prestatario. El TAE es el indicador que utilizamos para ver cuál es el coste real de la operación y lo que al fin de cuentas, sale del bolsillo del cliente.